MADRID.- Benedicto XVI cargó contra las estructuras económicas que ponen los beneficios por delante de las personas. Fue un mensaje contundente en una España en crisis, donde el costo del viaje del sumo pontífice ha generado violentas protestas en la capital.

"La economía no se puede medir por el máximo beneficio, sino por el bien común", destacó el Papa durante el viaje en avión a Madrid. "La economía no funciona sólo con la autorregulación mercantil, sino que necesita de la razón ética para trabajar para el hombre", añadió durante una charla con periodistas.

El Papa también puso énfasis en que la ética es fundamental en el funcionamiento de la economía y consideró algo perverso que los jóvenes no puedan encontrar trabajo. La economía española está luchando por salir de una recesión que ha dejado a una de cada cinco personas desempleadas, muchas de ellas jóvenes. (Reuter-Especial)